¿Cómo saber qué colores nos favorecen? (II)
En una entrada anterior vimos la teoría que aplican los estilistas para decidir qué colores favorecen a una persona. Ahora vamos a pasar a la práctica y proponer un método sencillo que se puede utilizar para encontrar los colores que mejor nos sientan.
El método se basa en la teoría de las estaciones de color. Esta teoría dice que los colores se pueden clasificar en 4 grupos1 o paletas, que reciben el nombre de las estaciones del año: primavera, verano, otoño e invierno. Cada persona, dependiendo de su color de piel, pelo y ojos, armonizará con uno de esos grupos y se verá especialmente favorecida por los colores de esa paleta. Pero, ¿cómo podríamos saber cuál es esa paleta que armoniza con nosotros? O, dicho de otra forma, ¿cómo podemos saber cuál es nuestra estación de color?
La verdad es que, si queremos estar absolutamente seguros, lo mejor sería contratar a un profesional del análisis de color. Él (o ella) podría decirnos qué colores exactos nos favorecen, más allá incluso de la paleta de una de las estaciones. Pero imaginemos que no nos hace falta tanta exactitud; al fin y al cabo, no somos estrellas de Hollywood ni aspiramos a serlo (¿verdad?). Si nos basta con tener una idea aproximada de nuestros mejores colores, podemos conseguirlo con el siguiente procedimiento casero.
Primer paso: determinar si nuestro subtono es cálido o frío.
Para determinar si nuestro subtono2 es cálido o frío, podemos hacer lo siguiente:
– Buscar prendas ligeras (camisetas, fulares) de los siguientes colores: marrón chocolate, azul marino, blanco, crema, naranja y rosa.
– Buscar un lugar con luz natural, pero sin sol directo. Podría ser frente a una ventana.
– Llevar las prendas, un espejo y un móvil con cámara de fotos a la zona de luz natural y empezar a probarnos las prendas de la siguiente forma3:
1) Nos cubrimos los hombros con las prendas marrón chocolate y azul marino. Retiramos la que quede arriba rápidamente, para comparar el efecto de esta con la que queda abajo. Podemos observar el efecto en el espejo o incluso sacarnos fotos y comparar el efecto en ellas.
Lo que vamos a observar es el conjunto de colores de nuestra cara junto con el de la prenda, y o bien nuestra cara presentará un aspecto sano (color natural, sin sombras, sin marcarse excesivamente las manchas o las ojeras) o enfermizo (color grisáceo o amarillento, sombras bajo la barbilla, ojeras y manchas marcadas).
2º) Hacemos lo mismo que antes pero con las prendas crema y blanca.
3º) Repetimos con las prendas naranja y rosa.
– Tras la comparación, decidimos si, globalmente, son más favorecedoras las prendas de color cálido (marrón, crema, naranja) o las de color frío (azul marino, blanco, rosa). Si son las primeras, nuestro subtono será cálido, y nuestra estación de color, primavera u otoño. Si son las segundas, nuestro subtono será frío, y nuestra estación de color, verano o invierno.
Podemos ver un ejemplo en la imagen siguiente. La cara de la modelo junto con los colores de abajo (fríos) se ve más fresca, con la piel más uniforme, los dientes más blancos y los ojos más brillantes que cuando está junto con los colores de arriba (cálidos). De hecho, su piel se ve amarillenta cuando está junto con los colores cálidos. Por lo tanto, el subtono de piel de la chica sería frío, y su estación de color sería o bien verano o bien invierno4.
Segundo paso: determinar si nuestro croma es suave o brillante.
Para determinar si nuestro croma es suave o brillante, seguiremos un proceso parecido al anterior:
– Buscar prendas ligeras de los siguientes colores:
→ Si nuestro subtono es frío: azul vivo, azul grisáceo, verde esmeralda, verde salvia (grisáceo).
→ Si nuestro subtono es cálido: verde oliva, verde hoja, amarillo mostaza, amarillo dorado brillante.
– Llevar las prendas a la zona de luz natural y probárnoslas, tal y como hicimos la vez anterior. Si nos sientan mejor los colores vivos, nuestro croma será brillante, mientras que si es el caso contrario, nuestro croma será suave. Por lo tanto:
→ Si nuestro subtono es frío y nos favorecen los colores vivos, nuestra estación sería invierno; en el caso contrario, nuestra estación sería verano.
→ Si nuestro subtono es cálido y nos favorecen los colores vivos, nuestra estación sería primavera; en el caso contrario, nuestra estación sería otoño.
Volviendo al ejemplo de antes, en la figura siguiente se ve que las tonalidades de la piel, el pelo y los ojos de la chica armonizan mejor con los colores de arriba (vivos) que con los de abajo (suaves). De hecho, parece como si las facciones de la chica en las fotos de abajo estuvieran más desdibujadas. Por tanto, la paleta de colores que resulta favorecedora, en su caso, contiene colores fríos y brillantes, por lo que su estación de color será invierno.
Tercer paso: conocer nuestra paleta de colores.
Una vez conocemos cuál es nuestra estación de color, conviene que nos familiaricemos con los colores básicos de nuestra paleta, para poder utilizarlos en la ropa, el maquillaje y el pelo, si lo teñimos.
En la imagen de cabecera se muestran los colores más representativos de cada estación de color. Pongo aquí los nombres de estos colores para ayudar a identificarlos. En el mismo orden de la foto (de izquierda a derecha y de arriba abajo) y para cada estación de color, son:
→ Primavera: blanco marfil, beige, camel, azul marino brillante, coral, rojo anaranjado, azul turquesa, verde hoja, violeta.
→ Verano: blanco roto, marrón rosado, azul grisáceo, azul marino grisáceo, rosa empolvado, rojo azulado, azul cielo, azul verdoso, malva.
→ Otoño: blanco ostra, beige, camel, marrón chocolate, naranja calabaza, rojo anaranjado, azul verdoso, verde oliva, amarillo mostaza.
→ Invierno: blanco, gris, azul marino, negro, fucsia, rojo burdeos, azul Klein, verde puro, verde esmeralda.
En todos los casos, los cuatro primeros colores que he puesto son colores neutros, muy combinables. Aunque realmente todos los colores de una misma paleta combinan entre sí, lo que resulta muy útil a la hora de conjuntar la ropa.
¿Has conseguido averiguar cuál es tu estación de color? ¿Te gustan los colores de alguna paleta en particular? Puedes dejar tu comentario o sugerencia más abajo.
REFERENCIAS
La foto de la modelo que se utiliza en los ejemplos fue tomada por Jake Nackos para Unsplash.
1 Carole Jackson, “Colour Me Beautiful”, Platkus Books (1983).
2 Se habla de subtono, y no de tono, cuando nos referimos a la piel de las personas, porque a veces la piel aparenta ser cálida, pero los colores que armonizan con ella son fríos, como sucede en el caso de las pieles oliva.
3 Para hacer la comparación de colores, es importante estar sin maquillaje y, si nos teñimos el pelo, tenerlo recogido o cubierto por un pañuelo de color neutro (gris medio, blanco roto).
4 La comparación de colores es más fácil en persona que en un montaje fotográfico como el que se muestra en la figura porque, en persona, una parte de la luz que se refleja en el color se proyecta sobre la cara, y eso amplifica los efectos que se pueden observar.